ACCÉSIT JUANA DE VEGA DE INTERVENCIONES en el PAISAJE 2019
AUTOR: Iago Fernández Puentes COLABORADORES: Javier Montero Pérez, Montse Martínez Pérez y Joaquín Lustres Carregal PROMOTOR: Ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa.
Las características formales de la parcela, su orientación, junto a su posición de borde de núcleo obligaron a adoptar estrategias dirigidas a completar el tejido urbano consolidado, aliviar la densidad construida y minimizar en lo posible, el impacto visual y paisajístico producido por edificios de viviendas cuyas escalas contrastan con la villa tradicional y su entorno.
Para alcanzar esa relación en el margen del núcleo, el nuevo edificio intenta apoyarse en las preexistencias de una trama que conserva parte de su parcelario original, definido por la sinuosa traza de su viario, que deja espacios de huerta en las traseras de unas edificaciones de volúmenes simples y cubiertas a dos aguas, sin olvidarnos de las naves industriales que también imprimen carácter a la zona y definen la identidad de esta villa orientada al trabajo en el mar.
Esta lógica y organización espacial, junto a la humildad constructiva de sus tipologías arquitectónicas - viviendas marineras y fábricas en desuso-, lejos de constituirse como un condicionante infranqueable para un edificio contemporáneo, presentaba buenas oportunidades para acoger la versatilidad de un programa destinado a la educación integral de los más pequeños.
Partiendo del punto de principal conexión con la villa, donde se sitúa la entrada de la escuela, un conjunto de volúmenes bien definidos se van quebrando y ondulando siguiendo el desarrollo ascendiente de la calle Miramar. La configuración de una nueva topografía, que envuelve buena parte de lo construido a través de una cubierta vegetal, favorece la transición entre los dos grandes espacios abiertos: un jardín al norte, que nos separa de la carretera, y el patio orientado al sur, sobre el que gravita la zona común del edificio, al que se abren las aulas y demás dependencias. La relación interior - patio exterior se resuelve mediante un muro cortina que recorre toda la fachada posterior, configurándose como un gran ámbito polivalente, luminoso y soleado, que posibilita los juegos y las relaciones interpersonales en el interior o al aire libre, dependiendo de las condiciones climáticas de cada momento.
El decidido protagonismo de los espacios abiertos ajardinados, que condicionan la composición volumétrica, la orientación de las fachadas de vidrio y la organización de los espacios interiores, junto al resto de materiales que conforman la estructura, la envolvente y los acabados, con el uso predominante del hormigón y la madera natural, definen una racionalidad constructiva basada en criterios de sencillez formal, sustentabilidad y eficiencia energética, economía de medios e integración en el territorio que mejora notablemente el espacio público inmediato.
