Desde el martes 8 al jueves 10, Alfonso Rivas, director del área de Investigación e Innovación, asiste en Frick (Suiza), a la reunión presencial del proyecto europeo BIOservicES.
BIOservicES (Linking soil biodiversity and ecosystem functions and services in different land uses: from the identification of drivers, pressures and climate change resilience to their economic valuation) está cofinanciado por el programa Horizonte Europa con 7,4M€, en el marco de la Misión Suelos, que tiene por objetivo principal conocer el estado de la biodiversidad del suelo en Europa y su relación con los servicios ecosistémicos.
La Fundación Juana de Vega es uno de los 22 socios (de once países), en el que colabora en trabajos relacionados con las zonas experimentales en Galicia y la medición de los servicios ecosistémicos culturales.
El período de ejecución de BIOservicES abarca entre septiembre de 2023 y agosto de 2028. Está coordinado por el catedrático Raúl Zornoza, de la Universidad Politécnica de Cartagena, e involucra tanto a universidades y centros de investigación como empresas y fundaciones, como la Juana de Vega, recogiendo una amplia experiencia en agricultura, innovación y comunicación.
Durante cinco años, la investigación ahondará en las interconexiones entre la biodiversidad del suelo, sus organismos y las funciones y servicios ecosistémicos en diferentes usos del territorio. La iniciativa pretende proporcionar nuevos conocimientos, indicadores y herramientas digitales para la toma de decisiones que ayuden a diseñar prácticas de gestión resilientes al clima y programas de seguimiento, conservación y restauración adaptados a los distintos entornos europeos.
Anfitriones
La reunión de esta semana tiene lugar en el FIBL (Instituto de Investigación en Agricultura Orgánica), también socio de BIOservicES. Las principales líneas de investigación del FIBL son la fertilidad del suelo, el manejo de nutrientes, técnicas de cultivo, además de centrarse en investigación aplicada para proporcionar herramientas de agricultura orgánica a los agricultores. Otras ramas de actuación son la política agraria, el consumo o la sostenibilidad. A modo de dato numérico que muestra su importancia, la agricultura de Suiza pasó de 9.981 hectáreas en orgánico en 1990 a 190.000 hectáreas en 2023.
